Nos levantamos temprano porque el día viene caluroso. La temperatura a las 8 de la mañana es de 4 grados en la cota 1200 y caminamos entre los árboles para salvar el zócalo de bosque donde a estas alturas de la temporada no hay nada de nieve. Cuando calzamos los esquies llevamos hora y cuarto de calcetinada y hemos llegado a la chabola. De ahí en adelante nos movemos por nieve ondulada por la lluvia, blanda por debajo y un poco dura por encima. Los esquíes no se hunden y subimos hasta el primer resalte, donde tenemos que quitar para superarlo. La última parte la hacemos con cuidado ya que la capa de nieve es muy profunda y el avance lo hacemos muy lentamente. En un punto, por seguridad, decidimos dar la vuelta. La cima la dejamos para otra vez. Desdendemos por nieve poco transformada hasta el lago. El calor, ahora agobiante, ha machacado la nieve dejándola muy difícil de manejar. Cuando llegamos al bosque, estamos deshidratados. Agua, cerveza, comida y siesta, y a disfrutar de la primavera.
El Midi con las laderas hacia el Sur peladas.
La nieve a partir de una cota lo cubre todo
La lluvia de los días anteriores ha dejado la nieve con ondas
En el primer resalte quitamos los esquíes y subimos hundiéndonos bastante en la nieve
Ultimos metros con los esquies
Descendemos por nieve primavera. Al fondo se ven nuestras huellas.
Fin de la jornada. Cerveza y siesta. Aún tenemos que descender media hora caminando al valle.
Perfecta descripción de lo que nos toca ahora... Al menos aprovechais lo poco que parece quedar. Esperemos que lleguen nuevas nieves y algo de frio para prolongar el show.
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