miércoles, 22 de mayo de 2013

Soledad en el Valle de Arán (1ª Parte) - Collado de Cendrosa

Nieve de Enero bajo el sol de Mayo


A la vista de un fin de semana de los de no salir, pero con la prespectiva de cenar y disfrutar de la compañía de Karmele y Juanjo, nos encaminamos hacia el Valle de Arán. En la carretera no llueve, y eso nos anima pensando que quizás las previsiones no sean tan malas. La luna hace su aparición sobre la torre de la iglesia de Casarilh, dejando a la vista algunas estrellas que parpadean sobre las montañas. El sábado no madrugamos puesto que las nubes se han apoderado del valle. La pequeña carretera que sube a los baños de Tredós está blanca. Ha nevado y mucho. El sol aparece detrás de un negro nubarrón.
Sobre medio metro de nieve creamos entre todos una buena huella hasta el collado de Cendrosa. Paramos sobre las grandes cornisas que se asoman sobre el val de Ruda y el refugio de Saboredo. La nieve nos golpea la cara a modo de perdigonazos, quitamos pieles y descendemos sobre nuestros pasos. El sol calienta cuando llegamos al valle. Abrimos las mochilas y dejamos las viandas sobre las mesas del pic nic. Estamos en Mayo.


Aquí empezamos nuestra excursión. Nieve desde el coche.

Huella en nieve recién caida

Estampa invernal

No es lo que parece. Enero en Mayo

Nuestro camino entre los árboles



A la vista del collado

Collado de Cendrosa. Punto final del día

Seracs en el collado

Comenzamos el descenso cuando las nubes nos atrapan





Y sigue nevando.......

Longaniza y morcilla. Para estómagos todo terreno.

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