martes, 16 de abril de 2013

Retorno a Bujaruelo

Otal - Las dos caras de una montaña

Son ya muchos años sin venir a esta zona escondida del Pirineo. Este valle por donde discurre el río Ara, tan inacessible en  invierno, se muestra ahora primaveral y espléndido. La nieve, estas últimas semanas ha desaparecido de las zonas bajas, por lo que toca caminar para alcanzarla. Nos acercamos por la pista hacia el valle de Otal, bajo un cálido sol, que poco a poco se nos esconde por la llegada de un frente, y nos hace descender rápidamende desde las crestas hacia el col de Ordiso. Las nubes juegan con nosotros, van y vienen, y cuando llegamos al valle se alejan. Es viernes tarde, no tenemos prisa y paramos a ver silbar a las marmotas que salen al sol para volver a la vida. 
Compartimos mesa con dos madrileños en el refugio de Bujaruelo. El guarda,  Rafa?? nos aconseja subir al Pico de Otal por el barranco del Turbón. Caminamos bajo las mochilas y en zapatillas durante una hora hasta alcanzar la nieve. La subida, sin descanso hasta el col de Otal, se nos hace larga y sostenida. Nos asomamos al collado y subimos a un pequeño promontorio, a una antecima del Pico. Miramos con respeto a esta gran montaña. Qué belleza!. Otra vez será. Bajamos con alegría las primeras palas, y después con un poco de cuidado, ya que la nieve se ha transformado demasiado en la parte baja. Cruzamos el arroyo y saboreamos la primavera.



La impresionante pirámide del Pico de Otal.


Agua por todas partes en el valle de Bujaruelo

Río Ara

La muralla del circo glaciar del Valle de Otal

Las crestas del Turbón y Pico de Otal


Por encima del col de Ordiso, las nubes se acercan y nos envuelven rápidamente.

Subimos a las crestas

Y nos vamos hacia el valle rápidamente.


Y de nuevo sale el sol....

Rumbo al Otal desde el barranco del Turbón


Cruzamos el arroyo,y ponemos esquíes encima de la avalancha.




Sobre el col de Otal

Y desde allí hacia una antecima del pico.


La cima la dejamos para otra ocasión.


Empieza lo bueno...

El pico Royo y su espléndida pala a nuestra izquierda.



La muralla de Ordesa al fondo

Y la primavera aparece por todas partes...

Un descanso antes de comenzar de nuevo la bajada hacia el valle.

El plato preparado por el guarda del refugio. Delicioso pollo a la brasa.

No hay comentarios:

Publicar un comentario